San Juan Bautista es conmemorado en todo el mundo cada 24 de junio. Si bien no se conoce con exactitud la fecha en la que Santa Isabel, su madre, dio a luz, se toma este día en su memoria. Además, durante la noche del 23 se suele celebrar la Noche de San Juan en su honor, durante la cual se llevan adelante distintos rituales, como saltar hogueras y quemar muñecos o judas sobre fogatas o fogaratas.
Se trata de un santo muy importante, más que nada por haber sido el primo de Jesús de Nazareth, también por haber instituido el sacramento del bautismo en el río Jordán, cuando ungió la cabeza de Jesús en el agua (es por ello que se lo llama Juan el Bautista) y, además, por haber sido el último profeta antes de la venida de Cristo.
San Juan Bautista: cuál es su historia
San Juan Bautista nació en el siglo I a.C., unos seis meses antes de Jesús, y sus padres eran Isabel y Zacarías un matrimonio entrado en la vejez. A pesar de la esterilidad de Isabel, ambos oraban por un hijo. Las Santas Escrituras relatan que un día se le apareció un ángel del Señor a Zacarías y le dijo: “Zacarías, no temas, porque tu oración ha sido escuchada, y tu mujer Isabel te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan” (Lucas 1:13). Como Zacarías no creyó al ángel, este lo dejó mudo. Al poco tiempo, Isabel quedó embarazada y al dar a luz, los presentes sugirieron el nombre de la familia Zacarías, pero Isabel y su esposo, mudo todavía, se negaron a ello y le pusieron el nombre que habían escuchado del ángel: Juan.
A pesar de dicho relato, Juan el Bautista fue concebido de forma natural, no por intercesión del Espíritu Santo, como sí ocurrió con Jesús.
Su misión principal fue predicar el arrepentimiento y bautizar a la gente en el río Jordán, una acción que era un símbolo de purificación y preparación para la llegada del Mesías. Es más, fue el encargado de bautizar al mismísimo Jesús. Este evento es significativo porque en ese momento se dice que el Espíritu Santo descendió sobre Jesús y se escuchó la voz de Dios Padre. El relato cuenta que “cuando Jesús fue bautizado, subió luego del agua, y los cielos se abrieron, y vio al Espíritu de Dios, que descendía como paloma, y se posaba sobre él; y se oyó una voz del cielo que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia”. Este es considerada la primera manifestación de la Santísima Trinidad.
Es considerado un profeta que preparó el camino para la llegada de Jesús en la Tierra, y luego se convirtió en discípulo de su primo. Juan Bautista fue encarcelado y murió decapitado a manos del rey Herodes, por lo que se lo considera un mártir. Jesús, después de haber escuchado la noticia del fallecimiento, realiza dos milagros: la multiplicación de los panes y el caminar sobre el agua.
Oración de San Juan Bautista para pedir su ayuda
Tal como señala la Agencia Católica de Informaciones- ACI Prensa, esta es la oración para pedirle a Juan Bautista por cualquier necesidad:
Bendito San Juan Bautista, que fuiste elegido para anunciar a los hombres
la venida del reino de Cristo,
guía nuestros pasos por las sendas de la justicia y la paz,
y alcánzanos del Señor su misericordia y perdón.
Gloriosísimo San Juan Bautista,
precursor de mi Señor Jesucristo,
lucero hermoso del mejor sol,
trompeta del Cielo,
voz del verbo eterno,
consígueme del Señor su benevolencia y bendición.
Tú que eres el mayor de los santos
y alférez del Rey de la Gloria,
que eres más hijo de la gracia que de la naturaleza,
y por todas las razones
príncipe poderosísimo en el Cielo,
consígueme del Señor su clemencia y protección .
Glorioso San Juan Bautista,
hoy en mi desespero te ruego
que me ayudes en estos duros momentos,
necesito tu valioso auxilio
para solucionar mis penas y miserias,
media ante el Señor para que me conceda:
(decir lo que se necesita conseguir)
Te pido mártir invencible que no desoigas mis penas
y por los privilegios con que te enriqueció Dios
consigue que mi pedido sea concedido lo antes posible
si fuere conveniente para mi salvación;
y si no, una perfecta resignación,
con abundante gracia,
que haciéndome amigo de Dios,
me asegure las felicidades eternas de la Gloria.
Amén.